Ideota: Fran Sedevich.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Destitulado


A veces creo que soy un tipo raro. En realidad tampoco sé si es así. Creo que diciendo eso estaría siendo injusto con aquellos “tipos raros” posta. Lo digo solamente porque tengo hábitos raros  Ahora mismo son (para ser asiáticamente precisos) las 2:27 AM de un ya día Miércoles y estaba cómodamente acostado sobre el piso de cerámicos mirando un documental de cetáceos. En una mano una tostada con manteca y en la otra una chocolatada casera hecha con un vasito de leche, dos de cacao, una de azúcar, esencia de vainilla a gusto y una cucharadita de crema para darle esa consistencia onda Cindor (se te hizo fucking agua la boca, I know) todo esto batido con la minipimer/mini pimer/mini pymer/ Mini P.Y.M.E.S (extremadamente pequeñas y medianas empresas o batidoras) No sé cómo se escribe. Me voy a abrir otro blog de recetas y se va a llamar Putilísima.

Ahora que lo pienso, podría dedicar un post entero a contarles de mis más extraños y desquiciados hábitos. Más adelante, hoy tenía ganas de hablar sobre otra cosa.

Como mencioné hace un tiempo aquí mismo, hace un par de semanas comencé las clases. Asisto (por ahora) solamente los lunes, martes y jueves.

Los lunes tengo esta materia llamada “Sujeto, psicología y cultura” que trata básicamente al sujeto, la psicología y la cultura. Eso se llama CERO GANAS DE EXPLICAR DE LO QUE TRATA LA MATERIA. Yo les adivino las necesidades y ustedes no necesitan saber de qué trata la materia para el post de hoy. Es como que te expliquen algo que ya sabés que no va en el examen. O sea todo bien, explicamelo, pero en el resumen que le voy a pedir a mi compañera no va a estar seguro así que FUCK OFF!!!!

En fin, ahora les voy a comentar algo que al principio les va a sonar raro, pero si lo piensan bien creo que no lo es tanto.

Yo en clase, NO ME ABURRO.

Bien, sonó rarísimo! Pero déjenme explicar. A lo que me refiero es a que, si se está desarrollando una clase sobre un tema que no sé, y no tengo nada mejor que hacer que ponerme a escuchar, lo hago. Me siento, escucho y haciéndolo descubrí que sea cual sea el tema tratado, no me aburre. Me aburro en el curso cuando ya sé hacia dónde va la charla o cuando sinceramente no estoy prestando atención y estoy eligiendo qué pajarito del Angry Birds uso para tumbar la última torre del nivel o con cuál de las lapiceras de mi compañera me voy a sacar el moco que tengo incrustado al fondo de la pared nasal.

Bueno, éste no fue ninguno de los casos anteriores. Estaba en una clase de la materia que mencioné antes (materia que estoy recursando). Odio profundamente el eterno Deja vu que implica recursar una materia, pero no me queda otra. En fin, estaba escuchando algo que ya escuché. Pero esta vez me cautivó, me cautivó porque ésta vez lo pensé desde otro lado y, si bien dejé de prestar atención, estuve todo el resto de la hora imaginando y viajando por mi mente.

La profesora hablaba de la niñez y de los traumas del adolescente o púber que abandona esa niñez y se siente en un estado de duelo  por su niñez perdida y dice “Por qué no puedo seguir siendo un niño?” Y ahí fue donde empecé y me fucking dije:

“Puta madre, por qué no puedo seguir siendo un niño?”

Ser un niño es lo mejor que hay.

Ser un niño es preocuparte por qué color vas a usar para pintar Córdoba en el mapa físico. No tener que ver cuándo abren las inscripciones, renegar con el sistema, sacar los apuntes, inscribirte a los exámenes, perder turnos, etc.

Ser un niño es preocuparte por saber a qué hora empieza el capítulo de Dragon Ball Z o de Pókemon para estar sentado en frente de la TV inamovible cada día, y no por saber si la dejaste embarazada o si te contagió ladillas.

Ser un niño es salir todos los días de tu casa con la remera de Mickey y los pantalones emparchados en las rodillas que te cosió tu abuela. Y no tener que preocuparte todos los fines de semana por ponerte algo nuevo.

Ser un niño es no tener que pensar si se rompió el auto, o el celular, o si es hora de cambiar de modelo. Es pensar si tu computadora va a leer el CD de Los Sims que te trajo tu mamá para el fin de semana, y si lo vas a poder instalar.

Ser un niño es tener miedo a cuando llega el 4 en el “5 remate” y la pelota vuela aaaalto y nadie sabe quién va a rematar y todos corren para todos lados. Y no tener miedo a qué vas a hacer de tu vida el día de mañana.

Ser un niño y ser exitoso en la vida es haber ganado la mayor cantidad de figuritas o bolitas habiendo competido y ganado limpiamente. Y no ver quién hace más plata a costa de quién.

Ser un niño es la inocencia de reírse cuando alguien dice “culo” o “pito”. Y no tener que acostumbrarse a escuchar cosas de todos los días como “muerte”.

Ser niño es tener la amistad más pura de la vida con tus amiguitos. Y no tener que enterarte que alguno te traicionó por alguna pollera.

Sinceramente, al leer esto pueden pensar que crecer y dejar de ser niño es una poronga. Grande enorme y horrible.

Puede que sea cierto, sí.

Lo que yo pienso después de escribir esto es que:

Primero, tuve la niñez más linda de todas. No pude haber pedido nada mejor.

Y segundo, riéndome pienso que…

Al día de hoy, yo:

- Sigo dibujando y coloreando y viendo qué colores elijo para pintar cada cosa.

- Sé con certeza todos los horarios de los capítulos de Pókemon y Dragon Ball Z y los miro siempre que puedo.

- Todavía tengo la bendición de que mi abuela me cosa mis pantalones J

- Sigo rogando que la PC me lea los juegos nuevos que traigo constantemente y me emociono mientras se instalan. Voy del living al baño, del baño a la pieza, de la pieza a la heladera y así, esperando el putísimo "100% completado. Viceá tranquilo, campeón!"

- Sigo jugando al 5 remate con mis amigos y mis amigas, y a pesar de ser un babacho de metro noventa y pesar noventa kilos, salgo corriendo como una nena asustada cuando llega el 4, jajaja.

- Tengo guardadas en una cajita en mi placard todas esas figuritas que gané limpiamente en aquellos recreos de primaria, donde me gastaba las manos como una lija jugando al "pri nada"

- Sigo riéndome y tentándome si alguien dice “culo” o “pito” en cualquier circunstancia:
            - “Ey, Fran”
            - “Qué pasa?”
            - “Culo”
            -  (Mi risa)


- Sigo teniendo esa amistad pura y abrazadora y mágica con todos mis amigos.



“Madurá, boludo!” Se escucha que me gritan desde sus casas, jajaja.

Yo les aconsejo lo contrario! Sigan manteniendo la magia del pequeño niño hincha pelotas y medio indio que tienen todos adentro.

Corran, boludeen, disfrácense, cáguense de risa y aprovechen!

Yo soy un pavote, bastante inmaduro que juega en la computadora todo el día, grita boludeces por la calle, le canta a la gente en el supermercado, asusta a las viejas desde el balcón con un láser, se tira siempre al piso o al pasto a jugar con sus mascotas, hace caras frente al espejo, se disfraza con sus amigos, cuenta chistes todo el tiempo y escribe todas las pelotudeces que se le cruzan por la cabeza en un blog. Y saben qué?

La paso bastante bien :) 

Quizás este posteo no sea tan parecido a los otros.
Quizás acá no describí graciosamente algún hecho o personaje.
Quizás algunos leyeron esto y ni siquiera se ríeron.

¡A mi me encantó escribirlo! Me divirtió mucho recordar cosas de mi niñez y en algunos momentos me emocionó hasta las lágrimas y me sentí tan contento, y… creo que de esto de trata mi ya preciado Anecdotario. De tocar también algunos corazones (¿?)

-          “Porque de tocar tetas ni hablar, virgen con carnet al día!”
-          “Chee, no se zarpen”
-          “Pito”
-           (Mi risa)


Y cierro dando las gracias a Eduardo, Bachicha, Norita, Carlos Saúl, José Manuel, Pedro y Martín R. por sus cálidos comentarios en mi post anterior. 

Un abrazo para todos!

7 comentarios:

  1. Ha ha ha ha, this guy is hilarious!!!

    ResponderEliminar
  2. Carlos Saúl Menem13 de marzo de 2013, 16:55

    No e nesario, como diría Sócrates "cortemo con tanta dulzura", con la mitá iá picaba má de un istinto maternal, pichón... no gaste pólvora en chimango, mentiende? y shecuerde siempre las palabras de este servidor..."ió soy un águila y las águilas no comen moscas".

    ResponderEliminar
  3. Ah, mi tocayo... así se escribe, querido...

    ResponderEliminar
  4. Un post diferente, pero necesario. "Todos tenemos un niño interior".. Muy bueno Fran!

    ResponderEliminar
  5. sos lo maaaaaaaas, es lo tuyo estoy jajajajajaja

    ResponderEliminar
  6. JA JA JA JA! Este muchacho cada dia esta mas y mas picarón JA JA JA JA! Yo de mi niñez lo unico que extraño, es que robar no era castigado con el titulo de "Crimen político" JA JA JA JA! Abrazo de gooool,

    Mas y Mejor

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Usted es un distinto, Eduardo. Es un Iniesta del blog

      Eliminar